Palenque es una de las ciudades más importantes del periodo Clásico del área maya (250-900). Este sitio fue en un inicio una aldea de agricultores y cazadores que con el tiempo se convirtió en la capital de una poderosa dinastía que dominó una extensa región. Estuvo oculta en la selva durante muchos siglos, fue sede de una poderosa dinastía a la que perteneció el rey Pakal. Alberga portentosos templos, palacios, plazas, tumbas, esculturas, inscripciones jeroglíficas con la historia del lugar. Patrimonio de la Humanidad desde 1987.
Se considera que Palenque tuvo su mayor auge entre los años 615 y 783. Un reflejo de su poderío son las plataformas, conjuntos ceremoniales, plazas, palacios, acueductos, mausoleos y unidades habitacionales. Hacia el año 800 contaba con una población cercana a los 8,000 habitantes. A partir de entonces la ciudad comenzó a declinar y un siglo después estaba abandonada, sin que se conozcan de manera clara las razones de su caída.
Los hallazgos encontrados en este sitio confirman que los mayas tenían una organización social y religiosa compleja, así como admirables conocimientos arquitectónicos, astronómicos y matemáticos. Además, los jeroglíficos de Palenque hablan de la historia militar de la ciudad, de las hazañas de sus gobernantes, de su calendario y sus rituales, aportando información invaluable sobre la cultura maya.